Pechugas Rellenas a la Plancha es uno de esos platos que mis compatriotas fácilmente adoptarán, y hay buenas razones para ello. Te explico...
Extrapolando de los datos generados el pasado diciembre por el Ministerio de Agricultura, los dominicanos consumimos más pollo, por mucho, que las próximas dos carnes más populares juntas. Esto no es de extrañar, el pollo es más económico, más abundante y fácil de cocinar que otras carnes. El pollo es también una de los alimentos menos controversiales.
En lo que se refiere a comidas extrañas estoy firmemente indecisa. Como persona que muy rara vez come carne, no hay una gran diferencia entre contemplar la carne de un pollo o la de un gato como potencialmente comestible, en lo que a mí concierne. Lo mismo puede decirse de la langosta (el insecto) o la langosta (el crustáceo). ¿Por qué induce una disgusto y la otra apetito? ¿No es acaso un asunto de costumbres?
Me recuerda esto a mis amigos ingleses que han visitado China, donde ni los productos lácteos ni el pan figuran en la dieta tradicional. Me han contado que la gente se aleja del olor "foráneo", el cual es más penetrante a las narices de los chinos por los productos lácteos que se consumen en el occidente. Prueba dejando de comer ajo por unos meses y verás a lo que me refiero. Una vez está fuera de tus sistema notarás el olor en todo el mundo.
Ahora que nos hemos recordado a nosotros mismos que lo que es normal para nosotros puede ser extraño y repulsivo para otros, o gracioso inclusive. Tratemos de abrir nuestras mentes a algunas experiencias nuevas:
Me embarqué en una búsqueda de recetas raras en el internet, y encontré que la langosta (el insecto) es conocido como "el camarón de los cielos", como si esto lo fuera a hacer más apetecible. Y por cierto, en algunos círculos se describe a los camarones como "las cucarachas del océano". Si me dan a escoger entre cucarachas y langostas (el insecto)... Las recetas para langostas (el insecto) todas incluyen freír o hornear. Todas especifican que deben removerse las patas con antelación.
Por estos lares la nominación obvia para un plato que garantiza repugnar a algunos sería el Mondongo, pero como se ha mencionado antes en nuestro blog muchas culturas culinarias incluyen el comer entrañas. Los ingleses les llaman "tripas" (tripes) y los españoles "callos". Los escoceses tomaron el arte de comer entrañas un paso más allá con el plato nacional de Escocia: haggis. Este consiste en un estómago de cordero relleno con el hígado, pulmones, corazón de cordero, más avena, manteca, cebolla y especias. ¿Te apetece?
Del lado vegetariano te presentamos la fruta más hedionda del mundo: el durián. Se dice que huele como la combinación de heces y vómito, y que una vez que ignoras el olor (?) sabe maravillosa, divina inclusive. Esta fruta procede de Asia, así que desafortunadamente tendré que esperar que esté por esos lares para ver si tengo las agallas para probarla.
No tan extremo, pero universalmente odiadas, son las colecitas de Bruselas. No contenta con generar las emisiones gaseosas más repugnantes después de las habichuelas con dulce, esta tiende a oler a desague cuando se dejan mucho tiempo en el plato.
La primera vez que oí de los gusanos como alimento potencial fue leyendo sobre un proyecto en Indonesia, donde un nutritivo y delicioso omelette de gusanos era servido a los niños del maternal. Desde entonces he leído sobre varios intentos de introducir los gusanos como una fuente económica de proteína en Sur y Centro América, pero no sé si se ha logrado.
Nuestros hermanos suramericanos comen hormigas fritas. También comen cuy, el cual se parece a los conejillos de Indias. Para alguna gente esto es demasiado cerca a poner la mascota de la casa en el barbecue. ¿Pero no es todo esto acaso un asunto de condicionamiento cultural?
Las serpientes son una delicia en el Oriente, en Francia se come caballo y ancas de rana. Los árabes comen ojos de cordero. Y aquí se come (o comía) carne de iguana, al igual que en América Central. Esta es una receta que no tenemos planes de agregar a nuestra colección. Por lo pronto tendrás que contentarte con otra receta de pollo:
Pechugas de pollo a la plancha.
Pero dudo que habrán quejas sobre este plato.
Tía Ilana
Recetas Pechugas Rellenas a la Plancha
Ingredientes
- 6 pechugas de pollo
- 1 1/4 cucharaditas de sal , cantidad dividida
- 1/2 cucharadita de pimienta
- 2 pimientos morrones
- 1/2 taza de aceitunas sin semilla
- 4 dientes de ajo
- 1 cucharada de aceite de freír (maní, maíz o soya)
- 1/3 taza aceite de oliva
- Jugo de medio limón
- 4 ramitos de cilantro
Elaboración paso a paso
- Con un cuchillo bien afilado ahueca la pechuga para formar un "bolsillo".
- Unta cada una con una cucharadita de sal y una pizca de pimienta por dentro y por fuera. Reserva.
- Corta los pimiento en trocitos. Mezcla con las aceitunas, una pizca de pimienta y el ajo y lleva al procesador de alimentos para formar una pasta gruesa.
- Rellena las pechugas con esta pasta y cierra el lado abierto con palillos.
- Calienta el aceite a fuego alto en una sartén grande.
- Agrega las pechugas (cuidado con las salpicaduras) y cuece hasta que doren por un lado. Voltea las pechugas y dora por el otro lado.
- Reduce el fuego a medio y tapa. Las pechugas continuarán cociéndose en el jugo que suelta el relleno.
- Voltea regularmente. Cuando se halla secado el líquido dora un poco más y retira del fuego.
- Lleva el aceite de oliva, jugo de limón, cilantro y una 1/4 cucharadita de sal al procesador y licúa.
- Sirve las pechugas (después de sacar los palillos) banádas con una cucharadita de la salsa de cilantro.
Probaré con esta receta y luego opinaré
Estoy con una dieta alta en proteinas porque no estoy procesando bien el azucar de los carbs y como comprenderas es un suplicio comer tanto pollo (que es lo que mas te indican en los menus) gracias a ti me lo comere en esta receta que se ve tan sencilla… Read more »
La palabra "dieta" tiene una connotacion naegativa, al igual que la palabra "tratar". Sugiero cambiar el lenguaje por alimentos adecuados, o convenientes. con la boca, hacemos nuestra tumba. Es posible que con la mente, y su esclavo el cerebro, logremos comer de todo, con moderacion, y escuchando al cuerpo cuando… Read more »